Hoy es uno de esos días reflexivos, uno de esos días, que te das cuenta que sigues teniendo preguntas sin respuestas y recuerdas aquellas personas que daban respuestas a algunas de las preguntas. Espero que donde estés, puedas leer esta carta, que quizás, no sea otra cosa, que la necesidad de sacar la tristeza del alma. Estoy aquí con mi pipa, dejando que el aroma del tabaco me transporte a esa época en que te conocí. Al igual que mi antiguo profesor de transcomunicación, Sinesio Darnell, que también es un amante de las pipas, conseguistes que me dejara seducir por el arte de fumar en pipa. Me acuerdo cuando nos conocimos, cuando después de una conferencia te acercastes a mi y me dijistes: "Tienes una mirada especial e intuyo que estás en la búsqueda del conocimiento y me gustaría que estuvieras en un grupo selecto, de no más de diez personas, para adentrarnos en la Kábala y el ocultismo, pero no espero que creas, solo que escuches y aportes tu Conocimiento" . Esas palabras