El mundo se ha detenido, el sistema capitalista que alimenta nuestra sociedad ha parado por obra de la naturaleza. Un virus invisible no sólo puede, en un futuro, destruir nuestro sistema económico, sino también social e incluso con la especie humana. El ser humano es débil frente a la naturaleza, aunque a veces nuestra prepotencia nos sitúa por encima de la pirámide del planeta.
Por suerte el Coronavirus, más concretamente el COVID-19, aunque está provocando muchas muertes, no es un virus extremadamente agresivo y peligroso. Tenemos hasta suerte.
No quiero hablar del virus como enfermedad, tampoco desde el punto de vista de la conspiración, sino de dar unas reflexiones y algunos consejos para "sobrevivir" en el aislamiento impuesto por algunos gobiernos.
La primera reflexión es darnos cuenta que no fuimos ni el primer animal en habitar la Tierra, ni vamos a ser los últimos. Otras especies están más preparadas que nosotros para afrontar peligros futuros.
La otra reflexión es pensar sobre la dependencia del sistema. No podemos salir de casa, no podemos acudir a ciertas tiendas o locales y en algunos casos no podemos ir ni a estudiar ni a trabajar. Nos sentimos extraños por romper nuestras rutinas, porque desde pequeños tenemos que estudiar, trabajar, consumir...y ahora el propio sistema, por seguridad, nos dice que debemos quedarnos en casa y dejar de hacer aquello por lo cual estamos programados.
En el aislamiento individual o familiar salen o saldrán problemas de convivencia, necesidad de salir o no saber que hacer, pues muchas personas no tienen inquietudes personales, carecen de poder de adaptación frente a los cambios y no se dan cuenta que no disponen de recursos propios internos para afrontar de la mejor manera posible la situación actual.
Mi recomendación es simple. Si tienes que estar en casa, si no puedes ver a familiares, parejas o amigos, pues tómate este tiempo para reflexionar, para leer, para hacer meditación, para reflexionar sobre tus objetivos en los próximos años. Intenta aprovechar este tiempo para mejorarte como persona.
Si te enfadas, si tienes estrés, de nada te va a servir. Simplemente mira, si quieres, las noticias dos veces al día y luego dedica tu tiempo a tu persona y a las personas de tu alrededor. No te obsesiones con ver a todas horas a expertos, contertulios, opiniones y redes sociales hablando sobre el coronavirus. Es bueno estar informados, pero no obsesionados.